La alcantarilla del afecto tiende a la irregularidad del fluir. Esta contingencia es total -como cualquier contingencia- y es el devenir propio del pulular sentimental diario, de los efectos y consecuencias no buscadas del amor/amar.
No sin pensar en la fiebre sanvalentinesca aclaro: "Todos pesamos los contenidos del sentir en términos de una banalidad no egoísta de sabernos queridos, esa es la persecución mas pura y fuerte de la cotidianeidad".
e aqui juaN. pareciera que todo esta emparentado con la desesperanza de saberse vil
viernes, 15 de febrero de 2008
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1 comentario:
Oh, Juan... cuanta razón.
Bonitas y cuasiacadémicas (de la academia del amor) palabras.
Besos!
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