e aqui juaN. pareciera que todo esta emparentado con la desesperanza de saberse vil
jueves, 28 de agosto de 2008
domingo, 24 de agosto de 2008
martes, 12 de agosto de 2008
LOS INFANTES. FRAGMENTO.
Hijo
No papá, ¿que pasa? Ahora íbamos a jugar a la “play”.
Amigo 1
Si, yo soy el Manchester. Tevez. (Imita a un locutor, imita que agarra el micrófono y se tapa una oreja). ”Ahí va Tevez, sigue por la banda derecha, encara al arquero. Gambetea, se la pasa a Ronaldo, Ronaldo a Tevez. Tevez, Tevez….Goooooool, goooooollll. Golazo del argentino Tevez. Un grande, un ídolo de la tierra del mate y la zamba. Grande Carlitos.”
Padre
Que tevez ni un carajo. Que mate, ni zamba, ni ocho cuartos, además, en todo caso la chacarera es mas argentina que la zamba. En su forma, en su construcción tonal esta la clave. Cha-ca-re-ra. Po-pu-lar. Na-cio-nal.
Siéntense, vamos, basta. Silencio. Vení Guido, sentate acá, vengan, vamos. Escúchenme de una vez. (Grita con la mirada perdida) Mónica, serviles algo a los chicos, deben tener sed. Dales algo.
No papá, ¿que pasa? Ahora íbamos a jugar a la “play”.
Amigo 1
Si, yo soy el Manchester. Tevez. (Imita a un locutor, imita que agarra el micrófono y se tapa una oreja). ”Ahí va Tevez, sigue por la banda derecha, encara al arquero. Gambetea, se la pasa a Ronaldo, Ronaldo a Tevez. Tevez, Tevez….Goooooool, goooooollll. Golazo del argentino Tevez. Un grande, un ídolo de la tierra del mate y la zamba. Grande Carlitos.”
Padre
Que tevez ni un carajo. Que mate, ni zamba, ni ocho cuartos, además, en todo caso la chacarera es mas argentina que la zamba. En su forma, en su construcción tonal esta la clave. Cha-ca-re-ra. Po-pu-lar. Na-cio-nal.
Siéntense, vamos, basta. Silencio. Vení Guido, sentate acá, vengan, vamos. Escúchenme de una vez. (Grita con la mirada perdida) Mónica, serviles algo a los chicos, deben tener sed. Dales algo.
lunes, 4 de agosto de 2008
"EL PERPETUO SOCORRO". TEATRO PUERTA ROJA. DOMINGOS 19hs
Como si la referencia a lo celestial, al remitente de beligerancia eclesiástica, tenga que estar situado en otro punto que se distinga de la propia morada del DIOS, el sótano es la única referencia espacial en “el perpetuo socorro”.
Es su terreno.Está este terreno que refiero, pero no casualmente está oprimido, bajofondo, monocromático y húmedo. Por él pasan posadolescentes en efervescencia, histéricas, enamoradas, libidinosas, fuertes, amenazadas. Por el paso de las chicas se deja el surco de la eterna idea de triunfo, de la contingencia de este. Por el discurso de las chicas esta la referencia a su profesor, su ya viejo profesor de teología, un mesurado cocinero, un retirado emprendedor.
“Carrizo”, la jefa, “Carrizo” nos lleva al angustioso liderazgo –en este caso femenino- de una armamentista organización. “Carrizo” es la obra, “Carrizo” es la ambivalencia del texto, es la forma “gris” de los momentos. Las heridas omnipresentes y el ampuloso valor de creerse victoriosa, como a veces también inefable perdedora.
Finalmente la cena, la ultima cena, distinguida de su progenitor, distinguida del profe manoseado. La ultima cena es esta la ultima unión, la ultima fase de algo que se quiebra por su propio formato agrietado.
“El perpetuo socorro” es el perpetuo socorro de una deidad que las simboliza, la mano fuerte de la doctrina, la idea de triunfo, el socorro. La solidaridad.Involucrarse en la reflexión de estas muchachas, es conmoverse con sus modos. Es advertirnos dentro de lo opresivo y poder salir distintos de ahí.
Es su terreno.Está este terreno que refiero, pero no casualmente está oprimido, bajofondo, monocromático y húmedo. Por él pasan posadolescentes en efervescencia, histéricas, enamoradas, libidinosas, fuertes, amenazadas. Por el paso de las chicas se deja el surco de la eterna idea de triunfo, de la contingencia de este. Por el discurso de las chicas esta la referencia a su profesor, su ya viejo profesor de teología, un mesurado cocinero, un retirado emprendedor.
“Carrizo”, la jefa, “Carrizo” nos lleva al angustioso liderazgo –en este caso femenino- de una armamentista organización. “Carrizo” es la obra, “Carrizo” es la ambivalencia del texto, es la forma “gris” de los momentos. Las heridas omnipresentes y el ampuloso valor de creerse victoriosa, como a veces también inefable perdedora.
Finalmente la cena, la ultima cena, distinguida de su progenitor, distinguida del profe manoseado. La ultima cena es esta la ultima unión, la ultima fase de algo que se quiebra por su propio formato agrietado.
“El perpetuo socorro” es el perpetuo socorro de una deidad que las simboliza, la mano fuerte de la doctrina, la idea de triunfo, el socorro. La solidaridad.Involucrarse en la reflexión de estas muchachas, es conmoverse con sus modos. Es advertirnos dentro de lo opresivo y poder salir distintos de ahí.
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